lunes, 17 de noviembre de 2008

Usted y yo en el País de las Maravillas.


La sociedad de nuestro país se destaca entre otras cosas por su doble moral. Es un conjunto polifacético de reglas y penalidades de cualquier índole que se complementan entre si, siempre y cuando busquen un fin común.

En República Dominicana el mas de 3.6 millones de los habitantes sigue viviendo en condiciones de pobreza lo que significaría aproximadamente un 42,24%. Más del 30% no tiene acceso a los servicios sanitarios básicos, que desde luego justifica los niveles de analfabetismo de un 15,4% en hombres y un 15,2% en mujeres, este otro dato estadístico nos explica el 15,50% de desempleo.
Esta situación está provocada por la mala distribución de la riqueza en un país donde durante años el 10% de la población ha retenido el 50% de los ingresos.

Sin embargo hay que tomárselo relax... ¡¡¡ósea!!! Estamos en ‘’VÍA DE DESARROLLO’’ para muestra un botón, tenemos un metro que ‘’lógicamente’’ es mas necesario. Analicemos bien pues no estamos tan mal, pagamos altísimos impuestos que no se reflejan en la mejora social, contamos con funcionarios públicos muchos de los cuales ganan en menos de un mes lo que a mas del 20% de la población le costaría ganarse en un año, tenemos instituciones cuyas nominas triplican la cantidad de empleados activos. Dígame usted, ¿No es este el país de las Maravillas?

Somos tan dichosos, los servicios públicos primarios son tan eficientes, ya ni recuerdos de que es un ‘’apagón’’, los servicios de agua potable están a la orden del día en los sectores de gran necesidad, y (esta es la mejor parte) en casos de desastres naturales no nos gana nadie en iniciativas preventivas. ¿Maravilloso no?

Nuestro desarrollo no tiene barreras, no conoce de tangibilidad, es incorpóreo y esta tan idealizado que es de hecho, totalmente imaginario. A sabiendas de esto, el Progreso que tanto se predica al punto de convertirse en tiempos de campaña en una especie de ideología política, nos paso por los lados, tan acelerado, tan lejano, tan teórico, que señores ni hacerse notar pudo, al menos no en donde realmente se le aclama, no por vanidad, sino por necesidad.

Definitivamente, este es el País de las Maravillas, tal vez no tan fantasmagórico como el de Alicia, pero si bastante impresionante e irónico, como lo inimaginable. Y usted se cuestionara, ¿Qué locura es esta? Lo que se plantea en este escrito no son justamente los pilares de nuestros gobiernos, pero diga usted ¿como no catalogarnos como un país de maravillas?... imagínese, estaría errada de no ver las cosas desde este punto de vista pues solo este país cuenta con las maravillas necesarias para soportar por años y años tan mala administración pública.



Fuentes de datos estadísticos (vigentes en el 2008):
CIA World Factbook
The World Factbook Guía del Mundo 2007
HDR
http://www.barrigaverde.net/?modulo=articulos&seccion_id=3&articulo=2716

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nice!!! muy interesante sobre todo las comparaciones y datos estadisticos, pero tengo muuucho esperando una nueva publicacion tuya.. ya es hora!!!!!

Tomas Guarocuya
Estudiante de Leyes
PUCMM Santigo.